Hay momentos en la vida donde nos sentimos estancados, paralizados y confundidos. Nos pasa a todos, no sentimos avance en el ámbito laboral, no vemos proceso en nuestra relación de pareja o talvez no logramos consolidar una relación.
Puede que hasta sintamos incertidumbre y no sepamos que hacer con nuestra vida. “soy bueno para muchas cosas¨ ¿pero a que realmente me quiero dedicar? ¿Qué me hace feliz? ¿Si tuviera que dedicarme a una sola cosa el resto de mi vida a que sería? ¿te lo has preguntado? porque yo si.. y no solo una, ni dos, sino varias veces.
Hay momentos en mi vida en los que me he sentido tan movilizada y agobiada que he tenido que detenerme, respirar y replantearme esta pregunta. ¿Realmente es esto lo que quiero hacer? si la respuesta es no, entonces se que algo tengo que cambiar y volver a empezar. Pero no desde cero, nunca empezamos desde cero (me parece un completo error decir eso) ya que empezamos algo nuevo pero con todo el aprendizaje que nos ha dejado lo que hemos vivido. Con experiencias, sabiduría y con cicatrices. ¿O es que somos los mismos que éramos hace un año? ¿O hace 2? No somos los mismos que éramos ayer.
Hay una frase que me gusta muchísimo que dice que lo único constante es el cambio. Cambiamos, aprendemos y evolucionamos. Así es la vida y es necesario para avanzar.
Pero volviendo a la pregunta…
¿Realmente es esto lo que quiero hacer con mi vida? ¿Realmente es esto lo que quieres hacer con tu vida? Se sincera, estamos en confianza. ¿Estás ejerciendo el trabajo que querías? ¿Estás con la pareja que soñabas? ¿Lograste hacer el viaje que tanto deseabas, emigrar a donde querías, y ese sinfín de cosas que siempre mentalizaste? Te invito a que contestes conmigo. Si la respuesta es no, que estás esperando para cambiar? La mayoría de las frustraciones proviene de eso que tanto posponemos, que procrastinamos y a lo que decimos “después lo hago” O por lo menos las mías.
Descubrí que de tanto posponer estaba poniendome y peor aún, estaba aplazando tantas cosas que quería hacer y era por miedo. Tener mío es normal, todos lo tenemos. Lo que no está bien es que el miedo te paralice. Y te preguntarás ¿Por dónde empiezo? De esas preguntas trampa que parecen sencillas pero sabemos que no lo son y a veces llegamos a ese momento donde nos sentimos estancados y necesitamos que nos ayuden y nos digan cómo.
Y esto me lleva a preguntarte ¿Te sientes estancada con tu vida? ¿En el área laboral, personal, o pareja? Lo primero que quiero decirte es que si repetimos constantemente los mismos patrones, no vamos a obtener resultados diferentes. Sé que suena repetitivo, pero para tener resultados diferentes, debemos hacer cosas diferentes.
Atrévete, arriésgate, tienes que hacer algo nuevo y diferente, mientras más quietos nos quedamos más nos paralizamos. Trata de salir de tu rutina y sobre todo, sal a buscarlo, haz que las cosas pasen. La motivación no va a venir a tocar tu puerta y decir “hola aquí llegué”. Sonará obvio pero la mejor manera de combatir algo es combatiéndolo.
No compares tu vida con la de nadie más, todos tenemos procesos y tiempos diferentes, por favor no caigas en ese error, tienes todo lo necesario para salir adelante y cómo les comenté una vez, no tenemos nada garantizado en esta vida, hoy no tenemos y mañana puede que no.
Nadie, y escucha bien NADIE tiene la vida perfecta, todos estamos luchando nuestras propias batallas, todas diferentes pero no por ello con más o menos valor. Cada quien tiene su tiempo, su manera y su proceso y eso hay que respetarlo.
Deja el miedo al fracaso, yo sé que el miedo nos paraliza, pero atreve te, intentalo. Imagínate logrando eso que deseas, sientelo! y repito no te compares, todos los procesos son diferentes y una vez lo sientas, sal a buscarlo, agarra un cuaderno y escríbelo, maquétalo, proyéctalo. Las oportunidades están ahí afuera y están para cada uno de nosotros.
Sal a buscarlas! y con esto no digo que vayas mañana e intentes todo de una vez, no, poco a poco, Escalon a escalón. De ser intensos, del apuro sólo nos va a quedar el cansancio. Si quieres tener éxito en algo no puedes rendirte a los cuatro meses. Si algo quieres algo te cuesta. Escúchate, nuestros pensamientos forjan nuestras acciones y por ende nuestro destino.
Escúchate, ¿Quien más va a saber lo que quieres si no eres tú? Se tu aliado, no te sabotees. Puedes repetirte todos los días todos los problemas que tienes, o repetirte todas las posibilidades. Disfruta el momento, vívelo y No reprimas tus emociones.
No comparto el pensamiento cliché de “pasa la página” “omítelo” lo que se reprime se acumula y luego explota, así que vívelo!. Si algo he aprendido es que todo es temporal, todo pasa. Vive tus emociones, disfrútalas! nadie puede estar feliz toda la vida, pero tampoco triste.
Te hago esta invitación a que te animes, te levantes y que juntas pongamos en nuestro tiempo, ganas y disposición para salir de este estancamiento temporal. Y sobre todo que veas todo el aprendizaje que llega con esto, sé que es duro, pero siempre hay algo nuevo que aprender.
Lo bueno de tocar fondo es que lo único que queda es subir.
